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Cinco meses...cincomil sentimientos en tan poco tiempo, y con ganas de más, de más cada día. Hasta este verano pasado, pocos fueron los sentimientos que brotaron de mi interior para explicarme lo que estaba viviendo. Ahora cada sonrisa, cada lágrima, cada abrazo, cada gesto, tiene un significado, una explicación...una causa. También siento dolor, por aquellos a quienes hago daño con estos sentimientos, porque no para todo el mundo el día a día es tan completo y tan alegre como para mí...y por eso a veces me siento egoísta, prepotente. Sé sentir, sé amar, sé estar triste....pero no sé dejar de sentir...Te Quiero, y no dejaré de sentirlo.